Encuentro del obispo diocesano con los periodistas de la zona de A Mariña

El obispo de Mondoñedo-Ferrol, Fernando García Cadiñanos, compartió este miércoles, un desayuno informal con los periodistas y comunicadores de la zona de A Mariña, con motivo de la fiesta de su patrono san Francisco de Sales.

El ya tradicional encuentro tuvo lugar en la residencia Betania de Viveiro, de las Hermanitas de los Ancianos Desamparados, y contó con la participación de los periodistas Juana Carrera y Baruk Domínguez (COPE de la Costa), Marita Negrelos (El Progreso), Lucía Rey (La Voz de Galicia), Mari Carmen López (responsable de comunicación de la Semana Santa de Viveiro) y Javier Martínez (servicio diocesano de comunicación). El obispo agasajó a los profesionales con un recuerdo elaborado por usuarios y voluntariado de Cáritas As Pontes.

La cita permitió al prelado darles las gracias personalmente por la cobertura que dedican a las noticias generadas por la Iglesia diocesana y realizar un repaso de los principales temas que han venido centrando la actividad eclesial durante los últimos meses, asuntos sociales, patrimoniales y también reivindicaciones dirigidas a los poderes públicos. Entre estas últimas, está la creación de un centro para personas sin hogar en A Mariña, pues no existe actualmente ningún recurso de este tipo en la zona.


Llamada a la Administración

También solicitó el obispo una mayor implicación de la Administración en la gestión y recuperación de los cementerios. En esta comarca las actuaciones en los cementerios recaen históricamente sobre la diócesis, pero es una tarea que realiza la Iglesia de forma subsidiaria, ya que no es competencia suya, tal como puntualizó García Cadiñanos. Así se lo ha solicitado, por ejemplo, a la alcaldesa de Barreiros, con quien se reunió recientemente para tratar el tema de la rehabilitación del cementerio de San Cosme de Barreiros, tras los hundimientos sufridos por culpa de su deterioro.


Nueva iluminación para la catedral de Mondoñedo

En el capítulo de patrimonio, Fernando García Cadiñanos hizo un repaso por las actuaciones de mejora de la catedral de Mondoñedo y la iglesia de Santo Estevo de O Vicedo, y anunció una inversión importante para el próximo año en la seo mindoniense: la renovación del sistema lumínico. Esta actuación será posible gracias a un convenio suscrito con la Fundación Endesa, con una inversión próxima a los 150.000 euros, que permitiría la adecuación de la iluminación a la actual normativa de seguridad. El proyecto total está valorado en 250.000 euros, de los cuales la diócesis buscará colaboración para su financiación.

En materia patrimonial, la diócesis ha solicitado una ayuda con cargo al 2% cultural del Ministerio de Cultura para rehabilitar el monasterio de San Salvador de Lourenzá, obras que permitirían acometer la renovación integral de la cubierta y la habilitación del claustro para uso público.


Digitalización del archivo diocesano

Otra de las peticiones lanzadas por el obispo a la Administración fue la necesidad de iniciar el proceso de digitalización de los fondos documentales del archivo diocesano de Mondoñedo, en concreto los libros parroquiales, que son especialmente demandados por los usuarios. Un proyecto de gran calado y a largo plazo que, aunque la diócesis trabaja desde hace años en esta dirección, escapa a sus capacidades de financiación.


Alcoa, pélets y comunicaciones

No faltaron las referencias a la situación de la fábrica de Alcoa, sobre la que insistió en la necesidad de invertir en industria, ya que, en sus palabras, «no sólo se puede vivir del turismo y los servicios». La crisis de los pélets también formaron parte del análisis del obispo. Insistió en la necesidad de apoyar al sector pesquero y en que sea este sector, y los ciudadanos, los que lideren la transformación necesaria para el futuro. No fue ajeno tampoco a los problemas que tiene este territorio en cuanto a las conexiones por carretera y ferrocarril.


Un 2023 agridulce

El prelado hizo un balance agridulce de 2023, recordando su presencia en Ribadeo para acompañar a las familias de los jóvenes fallecidos en el accidente de Xove o la despedida de la congregación de Marta y María, que dejó el Hospital Asilo por las obras y espera que vuelva.


Nueva realidad eclesial

Finalmente, monseñor García habló de cambiar hábitos con las unidades pastorales ante la falta de sacerdotes y la reducción de las comunidades para organizarse en torno de núcleos, como en las tierras de misión, aunque «estamos más avanzados que en otras partes de España». Avanzó que dentro de cuatro años hará la visita pastoral a la comarca mariñana, tomando como base Viveiro.

Fuente: COPE de la Costa-Ribadeo/El Progreso/Diócesis

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