Presentado por Javier García y coordinado por Baruk Domínguez
Intervención semanal del obispo Luis Ángel a través de la Cadena COPE
· IV DOMINGO DE PASCUA: Cristo es nuestro Pastor y nosotros somos su rebaño, llamados a participar en su admirable victoria sobre el pecado y la muerte. A través del bautismo nos integramos en la Iglesia, su rebaño, y hemos vuelto al pastor y guardián de nuestras vidas. Por eso, podemos siempre cantar llenos de confianza en Cristo: “El Señor es mi pastor, nada me falta”. Él nos da su gracia en los sacramentos, especialmente en la Eucaristía, cuya mesa abundante nos prepara cada domingo. Y, entrando por Él, la “puerta de las ovejas”, nos salvaremos. Él, especialmente a través del ministerio sacerdotal y de los miembros de la vida consagrada, sigue haciendo que encontremos pastos abundantes.
· Hoy, domingo 3 de mayo, se celebra la Jornada Mundial de Oración por las Vocaciones y Vocaciones Nativas bajo el lema “Jesús vive y te quiere vivo”. Organiza la Conferencia Episcopal Española (CEE), a través de la Comisión Episcopal de Clero y Seminarios, la Conferencia Española de Religiosos (CONFER), Obras Misionales Pontificias Pontificias (OMP) y la Conferencia Española de Institutos Seculares (CEDIS). El objetivo de esta jornada no es otro que el de visibilizar la llamada vocacional y sensibilizar a la sociedad sobre la importancia de colaborar con la oración y la aportación económica con todas las vocaciones del mundo.
· Ya que hablamos de vocaciones y misión evangelizadora, no podemos olvidar que este próximo jueves, 7 de mayo, se cumplen cuatro años de su ordenación episcopal y del inicio de su ministerio como obispo de Mondoñedo-Ferrol. ¿Cómo recuerda esa fecha y cómo valora todo lo que ha sucedido desde entonces?
· Una cuestión importante, que ya avanzó al principio de esta etapa ministerial, fue la necesidad de efectuar una reorganización parroquial a lo largo y ancho de nuestro territorio diocesano. Este Plan Diocesano de Unidades Pastorales (UPA) se ha estado ultimando durante los últimos meses a través de diferentes órganos consultores y de gobierno, entre los que se encuentran nuestros tres vicarios, nuestros siete arciprestes y el recientemente renovado Consejo Diocesano de Pastoral. Tras realizar un “borrador definitivo” del mismo, se planteó la conveniencia de que, para completar perfectamente su diseño, cada arciprestazgo lo diese a conocer a los feligreses de todas sus parroquias, con la finalidad de que todos aquellos fieles comprometidos tuviesen oportunidad de realizar cualquier aportación que se viese conveniente.
· Seguimos hablando de nuestras parroquias, en relación con el estado de alarma provocado por el coronavirus y las fases de desescalada que ha presentado esta semana el Gobierno. Esta pretendida “nueva normalidad” afectará al funcionamiento de los templos, las reuniones de grupos parroquiales y, posiblemente, a los grupos de catequesis, que podrán prepararse para celebrar confirmaciones y primeras comuniones, aunque en una fase más avanzada de esta desescalada. También afectará a las medidas que se están tomando en las residencias de ancianos, centros para menores y personas con discapacidad, el Centro de Día Gabriel Vázquez Seijas o el Albergue Pardo de Atín, ambos de Cáritas.
· Ya que hablamos de situaciones relacionadas con el coronavirus, no podemos olvidar que este pasado 1 de mayo celebramos la festividad de San José Obrero con la mirada puesta en los trabajadores que más están sufriendo esta crisis y también en las personas que se han quedado sin empleo por culpa de la pandemia. En el manifiesto que con motivo de este día ha hecho público la plataforma Iglesia por el Trabajo Decente (ITD), las entidades de inspiración cristiana que impulsan esta iniciativa (Cáritas, CONFER, Hermandad Obrera de Acción Católica-HOAC, Justicia y Paz, Juventud Estudiante Católica-JEC y Juventud Obrera Cristiana-JOC) reclaman con urgencia la aprobación de un ingreso mínimo garantizado, el reconocimiento del derecho a la prestación por desempleo para las personas empleadas de hogar, la regularización extraordinaria e inmediata de los trabajadores “sin papeles” y un pacto de Estado que apueste por la centralidad de la persona y el trabajo decente.
· Aunque hablemos de cuestiones complejas, la crisis del coronavirus también está sacando lo mejor de muchas personas y colectivos, tal y como hemos contado a lo largo de estos meses a través de nuestros medios diocesanos. En estos últimos días hemos sabido que la plataforma sin ánimo de lucro ConectamosVidas ha donado ocho teléfonos móviles a los Centros San Aníbal de Burela, que un empresario ha donado 200 pantallas faciales y dos ordenadores portátiles a la Residencia ‘Mi Casa’ de Ferrol o que Cáritas de Ortigueira ha iniciado una campaña de recogida de alimentos y productos de higiene personal, que se podrán depositar en el portal de la casa rectoral de doce del mediodía a cuatro de la tarde. También hemos visto a los mayores de las residencias Domusvi y Betania de Viveiro homenajeados por los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado o un “Padrenuestro” muy especial que ha surgido en la parroquia de Santa María de Caranza. Iniciativas, gestos y actos voluntarios que nos hacen reafirmar nuestra fe en la humanidad y seguir #ComunicandoEsperanza una semana más.
«Ser obispo de Mondoñedo-Ferrol es un gran don, un gran regalo que agradezco cada día al Señor»