Necesitamos la prensa (en el 24º aniversario de «Diario de Ferrol»)

Seguro que estaréis conmigo en que uno de los ejercicios más sanos y saludables es tomar un café matutino leyendo la prensa del día. Se trata de una actividad que muchos hemos realizado y que, a poco que observemos, descubrimos a centenares en las calles y plazas de nuestra ciudad. Saborear un café en la terraza o en la barra de un bar, leyendo los titulares del día, los artículos de opinión, las viñetas de humor, comentándolo con los amigos que también entran, es una manera de socializar, de entrar en relación, de no vivir aislados.

Porque el ser humano, fundamentalmente, es relación. “No es bueno que el hombre esté solo”, dijo Dios al inicio del mundo. Por eso, la prensa nos ayuda a ponernos en relación con el mundo en el que vivimos, nos ayuda a entenderlo y comprenderlo. Cada día, el periódico es una ventana que nos abre al mundo más lejano o más cercano, en una especie de balcón que nos permite observar y contemplar la realidad. De esta manera, nos entrelazamos, nos vinculamos, nos relacionamos con nuestro mundo, la casa común en la que vivimos y habitamos.

En un mundo globalizado, los vínculos se hacen especialmente importantes. Quizás por eso se nos invitaba a “pensar globalmente y actuar localmente”. Globalización y particularismo son los dos polos de una misma realidad que no se contrapone, sino que ha de ser vivida en un complejo y artesano equilibrio. Porque es necesario tener raíces, las que nos da nuestro entorno y nuestra cultura más cercana, pero no aislarnos de lo que sucede en nuestro mundo, del que vivimos y en el que estamos. La prensa local nos da herramientas para manejarnos en esta polaridad que siempre es necesario practicar.

Nuestro mundo también está caracterizado por la información. Vivimos en el mundo de la información. Necesita de esta. Una información que es inmediata, de fácil acceso, rápida y por múltiples medios. Pero sabemos los peligros que ello entraña. Por eso, junto a la información de los hechos, necesitamos también los elementos para el juicio, para la formación de criterios, para situarnos adecuadamente en nuestro mundo, para alentarnos en la esperanza de un mundo que se puede construir de buenas maneras. En ese sentido, la prensa escrita tiene una misión complementaria: nos permite observar la realidad con más pausa, con más criterio y sosiego; nos permite analizar y ayudarnos a crecer y a vivir en comunidad. Un periódico tiene esta difícil misión en la sociedad de los tuits. Para ello, es necesario que sepa vencer las tentaciones de la ideología, que se abra a la realidad en su complejidad, que no se someta a los poderes que nos totalizan incluso en la mirada.

Ferrol y su zona de influencia es una comarca preciosa. Lo sabemos. Y no sólo por su paisaje, sino por su gentes, por su historia, por su cultura, por su futuro. Necesitamos medios que nos unan, que nos ayuden a mirar, que nos generen esperanza, que nos abran perspectivas, que nos iluminen, que colaboren a crear comunidad, que nos ayuden a crecer en amistad social. En ese sentido, Diario de Ferrol es una buena apuesta, y tiene una gran misión y una gran tarea. Enhorabuena por este aniversario y que siga saliendo cada mañana con la ilusión de ofrecer a sus lectores vida, esperanza, compasión y futuro.

+ Fernando García Cadiñanos

Artículos relacionados

Síguenos

5,484FansMe gusta
4,606SeguidoresSeguir
1,230SuscriptoresSuscribirte

Últimas publicaciones

Etiquetas