Para orar cada día

9ª Semana del Tiempo Ordinario
Miércoles 7 de junio de 2023. Festividad de San Isaac de Córdoba
Comentarios de las Concepcionistas Franciscanas de Viveiro

No es un Dios de muertos, sino de vivos

Marcos 12, 18-27

En aquel tiempo, se le acercaron a Jesús unos saduceos, que niegan que haya resurrección, y le preguntaban: «Maestro, Moisés nos dejó escrito que si muere el hermano de alguno y deja mujer y no deja hijos, que su hermano tome a la mujer para dar descendencia a su hermano. Eran siete hermanos: el primero tomó mujer, pero murió sin dejar descendencia; también el segundo la tomó y murió sin dejar descendencia; y el tercero lo mismo. Ninguno de los siete dejó descendencia. Después de todos, murió también la mujer. En la resurrección, cuando resuciten, ¿de cuál de ellos será mujer? Porque los siete la tuvieron por mujer».

Jesús les contestó: «¿No estáis en un error precisamente por esto, por no entender las Escrituras ni el poder de Dios? Pues cuando resuciten de entre los muertos, ni ellos tomarán mujer ni ellas marido, sino que serán como ángeles en los cielos. Y acerca de que los muertos resucitan, ¿no habéis leído en el libro de Moisés, en lo de la zarza, cómo Dios le dijo: Yo soy el Dios de Abraham, el Dios de Isaac y el Dios de Jacob? No es un Dios de muertos, sino de vivos. Estáis en un gran error».


Comentario

Jesús se encontró a menudo con los intelectuales de su tiempo. Marcos recopila una serie de relatos de las controversias de Jesús y los círculos cultivados de herodianos y saduceos. Los saduceos, racionalistas y escépticos, que no creen en la resurrección, le hacen una pregunta absurda a Jesús creyendo que era la mejor manera de liar la cosa y quedarse con la suya, Jesús les hace ver su error por “no entender las Escrituras ni el poder de Dios”. Que la resurrección pertenece al poder de Dios y por consiguiente rebasa nuestra comprensión.

En el principio Dios creó al ser humano a su imagen y semejanza como una comunidad de amor y de vida. La buena noticia es que Dios ha creado hombres y mujeres capaces de relacionarse, de amarse, de compartir lo que son y lo que tienen en una comunidad de amor, que reflejen la comunidad de amor del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo.


Preguntas para reflexionar

¿Creo en la resurrección? ¿Qué significa para mí: “creo en la resurrección de la carne y en la vida eterna”?


Oración

Señor, es verdad que soy incapaz de comprender cómo resucitaremos, pero confío en ti. Tengo fe. Creo. Señor, haz que amemos las escrituras y abre nuestra inteligencia a su comprensión.