La nueva organización cambiará la vida de las parroquias tal y como las conocemos
Las personas consagradas, catequistas, voluntarios y las demás personas implicadas en las parroquias y UPA serán sus primeros receptores
Durante el primer trimestre de este año, el obispo de Mondoñedo-Ferrol y el vicario general acudieron a cada uno de los siete arciprestazgos de que está compuesta nuestra diócesis, tomando parte en la reunión de cada uno de ellos para exponer el nuevo Plan Diocesano de Unidades Pastorales y, al mismo tiempo, recoger nuevas indicaciones que cualquier sacerdote quisiera aportar a dicho plan, además de las que ya habían hecho en estos años de trabajo.
Igualmente, el Consejo de Pastoral estudió el plan e hizo sus valoraciones y aportaciones en la reunión de diciembre pasado. En reunión del Colegio de Arciprestes surgió la iniciativa de presentar el plan a todos los diocesanos, convocándolos por arciprestazgos.
Como las actuales circunstancias no permiten estas convocatorias y no queremos esperar más para dar a conocer el Plan Diocesano de Unidades Pastorales, hemos visto la oportunidad de enviarlo por medios telemáticos (principalmente WhatsApp y correo electrónico) en un archivo digital (PDF), junto con un breve vídeo explicativo. Queremos difundirlo comenzando por las personas consagradas, los catequistas, los voluntarios y las demás personas implicadas en las parroquias y UPA. Los arciprestes y los párrocos se encargarán de enviarlo y hacer las indicaciones oportunas. A ellos se les puede pedir si algún diocesano no lo recibe y tiene interés en conocerlo ya. Dentro de poco, cuando se realice este primer envío, el Servicio Diocesano de Comunicación hará una difusión generalizada del documento y del vídeo en nuestra web y redes sociales.
En la carta de presentación a los diocesanos de Mondoñedo-Ferrol que, firmada por nuestro obispo, acompaña esta difusión del Plan Diocesano de Unidades Pastorales, se nos dice: Cuanto sigue nos ha de ayudar a tomar conciencia del alcance de aquello que queremos emprender en este momento histórico, así como de la corresponsabilidad de cada bautizado y enviado en nuestra diócesis y, por supuesto, en el buen desarrollo de dicho plan.
En esta carta, el padre Luis Ángel comienza felicitándonos la Pascua de Resurrección, aún a pesar de la presente situación de emergencia sanitaria provocada por el COVID-19 que nos ha trastocado la vida. Hemos de prepararnos para que la travesía del coronavirus que está recorriendo la humanidad, no nos haga regresar al punto de partida como si no hubiera pasado nada. Lograrlo depende de la decisión de contribuir a que todo sea ´mejor´ a partir de ahora. Para los cristianos esta determinación es fruto de una llamada esperanzada a arrimar el hombro uniendo fe y vida […] Responder a los desafíos de este momento histórico exige este paso al frente de cada diocesano para que […] el mundo sea más justo y fraterno, sin descartar a nadie. En este contexto y con estas claves, nos indica nuestro prelado te pido que leas, comprendas, acojas y colabores en este Plan Diocesano de Unidades Pastorales. Es un medio para llegar más lejos.
El material que van a distribuir los arciprestazgos irá acompañado por una oración a Nuestra Señora de los Remedios (que recogemos aquí), como Madre y Patrona de nuestra Iglesia de Mondoñedo-Ferrol, a quien nos dirigimos en este momento de especial tribulación, a la vez que le presentamos nuestro futuro de Iglesia y, en él, el Plan de Unidades Pastorales.
· ORACIÓN A NUESTRA SEÑORA DE LOS REMEDIOS
Nuestra Señora de los Remedios,
Madre y Patrona de nuestra Iglesia de Mondoñedo-Ferrol
que peregrina en el Norte de Galicia desde hace más de un milenio.
Nos dirigimos a ti en un momento de especial tribulación.
Ponemos bajo tu amparo a cada persona que sufre
por la pandemia que asola nuestros hogares,
así como por tantos otros dolores que lastran nuestro mundo.
Te decimos “aquí estoy”, “aquí estamos”.
Como hermanos en Cristo, tu Hijo,
queremos seguir caminando al ritmo de estos tiempos.
Por ello, te presentamos nuestro futuro de Iglesia
y, en él, el Plan de Unidades Pastorales.
Quiere ser expresión de nuestra determinación
de resucitar continuamente a la vida
y vivir un camino pascual de conversión.
Te traemos, Madre, el agua de nuestro esfuerzo
en las tinajas de nuestra oración, reflexión y diálogo.
Sabemos que, aún siendo fresca y útil, no es suficiente.
Confiamos en que Tú la lleves a tu Hijo Jesús, como en Caná,
para que Él la convierta en el vino nuevo del reino de Dios.
Vino de esperanza, alegría y vida nueva,
que nos fortalezca para seguir peregrinando
por nuestros montes, llanuras y mares,
que descubren con su belleza
la bondad de Sus manos creadoras.
Vino de Su sangre derramada,
que nos invite a celebrar
un banquete nuevo, anticipio del eterno,
donde tengan cabida gentes de aldeas, puertos y ciudades,
—algunas llegadas de otros pueblos—;
un banquete de mesas amplias y fraternas,
signo de un mundo de paz y amor
en que brilla la plenitud del Resucitado.
Gracias, Señora de los Remedios, Virgen y Madre,
por guardarnos en tu corazón de discípula misionera.
Guíanos para hacer bien lo que Él nos diga.
Amén.
Mons. Luis Ángel: “Caminamos hacia un nuevo modo de ser y edificar la Iglesia (…) Te pido que leas, comprendas, acojas y colabores en este Plan Diocesano de Unidades Pastorales”